lunes, 23 de junio de 2008

ALCÁZAR SEGOVIA

El testimonio más antiguo de la existencia del Alcázar de Segovia es un documento de principios del siglo XII, fechado en 1122, poco después de la reconquista de la ciudad por Alfonso VI, que menciona la fortaleza como un castro sobre el Eresma. En una carta algo posterior (1155) ya se le da el nombre de Alcázar. No obstante, es muy probable que la fortificación existiese en tiempos más remotos, quizá desde la dominación romana, pues en recientes excavaciones se ha encontrado sillares de granito análogos a los del Acueducto. En la Edad Media, el Alcázar, tanto por la belleza de su situación y su indiscutible seguridad militar, se convirtió en una de las residencias favoritas de los Reyes de Castilla.



El alcázar de Segovia se divide en dos núcleos. El primero lo forman un patio herreriano con foso, el puente levadizo, la torre del homenaje y dos cubos circulares con chapiteles. El segundo es el interior y cuenta con una estupenda capilla y las salas nobles de la Galera, las Piñas y el Tocador de la Reina. Además, tiene cuatro pisos con buhardillas y amplios sótanos.
Destaca la sala de los Reyes que está decorada con un artesonado de hexágonos y rombos dorados y con un curioso friso con 52 imágenes policromadas y sedentes. En la sala del Trono, destaca una preciosa cúpula mudéjar y las yeserías gótico-mudéjares. Sus paredes están recubiertas con terciopelo y con retratos de distintos reyes.




La torre del homenaje fue edificada por Juan II en plena transición del románico al gótico. Alcanza los 80 metros de altura y se encuentra decorada con bellos esgrafiados y doce magníficas torrecillas. Se accede a través de un pasadizo. Durante el reinado de Felipe II, se recubrieron los tejados con originales chapiteles de pizarra.Destaca la torre de Alfonso X el Sabio, desde la cual el monarca estudiaba el firmamento, y las estupendas salas interiores decoradas con artesonados mudéjares y ricas yeserías.







EL ACUEDUCTO ROMANO DE SEGOVIA

El Acueducto de Segovia es la obra de ingeniería civil romana más importante de España. A su importancia histórica hay que sumar su valor estético y monumental, debido, fundamentalmente, al inolvidable impacto visual que provoca su contemplación casi desde cualquier ángulo... Sin embargo la parte visible, no deja de ser un pequeño tramo de todo un complejo hidráulico que puede rastrearse casi en su totalidad. Es obvio el valor arqueológico, no sólo de la conducción enterrada sino de la propia cacera aérea. Por otro lado, esta construcción, hasta no hace mucho tiempo, estuvo en uso y su característica funcional ha perdurado durante sus casi dos milenios de existencia, cuestión ésta que ha tenido un peso importante en su íntegra supervivencia.
Por otra parte, el Acueducto, a diferencia de otras construcciones similares, ha dado vida a lo largo de los siglos a un núcleo urbano que, en gran medida, se ha ido formando bajo su referencia (importante característica urbana). Es decir, no se trata de un resto del pasado mejor o peor conservado que ha quedado al margen del desarrollo de la ciudad, no se trata de un monumento muerto que sólo pueda ser contemplado como un objeto de museo y venerado por su importancia histórica. El acueducto romano es el elemento distintivo de la ciudad de Segovia, no sólo por que la atraviesa totalmente sino porque la ciudad no sería tal, ni en su fisonomía ni en su actividad, sin este atributo permanente. Aparte de todas las características enunciadas, quizás las más importantes sean, sobre todo para los segovianos, las culturales y las patrimoniales.



CATEDRAL SEGOVIA

La segunda mitad del siglo XIV y sobre todo las primeras décadas del siglo XVI suponen una revolución política y económica e Castilla (conquista de Granada, unificación política, colonización de América) que permite la construcción de infinidad de templos góticos muy tardíos y decadentes (gótico florido de procedencia flamenca que cristaliza en el estilo "isabelino") que en ocasiones se funde con las primeras manifestaciones renacentistas.
Desde el punto de vista arquitectónico se generalizan las bóvedas de crucería compleja con arcos combados y terceletes.
A diferencia del gótico clásico este gótico decadente si alcanza profusamente el mundo rural, aunque, en numerosas ocasiones, en versiones muy simplificadas.
Además, también se siguen erigiendo catedrales en este gótico final, como las naves de la catedral de Palencia, la catedral Nueva de Salamanca y la de Segovia, fase final de este estilo en España.


Llamada la "Dama de las Catedrales" la Catedral de Segovia fue construida entre 1525 y 1577, para sustituir el templo románico semidestruido en las guerras de las comunidades.
Por tanto es, junto a la catedral nueva de Salamanca, la muestra del gótico más tardía de la arquitectura española.
Fue trazada por Juan Gil de Hontañón como templo de tres naves, con capillas laterales, crucero y cabecera semicircular con girola, rodeada de capillas radiales.
El claustro gótico es de 1470 y es el que estaba adosado a la antigua catedral románica. Fue trasladado piedra a piedra a su nuevo emplazamiento. Son hermosas sus arcos con tracerías caladas.


LA IGLESIA DE LA VERA CRUZ(SEGOVIA)

Su atípica forma y su extraña ubicación (aislada en un inhóspito lugar), ha llamado siempre la atención, sobre todo a gente interesada en temas esotéricos.
Una de las curiosidades de esta iglesia es que todo el mundo dice de ella que tiene una planta octogonal... y resulta que es dodecagonal: no tiene ocho sino doce lados.
Es un dodecágono con tres ábsides cilíndricos adosados, una sacristía también cilíndrica y una torre de planta cuadrada.
Su modelo más directo es la iglesia del Santo Sepulcro de Jerusalén: tanto en forma como en función; esta iglesia no fue construida para ser templo parroquial ni capilla monástica: es más bien un santuario... o más concretamente, lo que se llama un "martyrium": un templo dedicado a evocar la muerte y resurrección de Cristo.


Popularmente, su origen está ligado a los caballeros templarios, pero no hay base documental para afirmarlo. Los que sí parece que fueron sus fundadores son los caballeros de la Orden del Santo Sepulcro, una orden castellana que consagró la iglesia en el año 1208. En 1531, la iglesia pasó a la Soberana Orden Militar y Hospitalaria de San Juan de Jerusalén, de Rodas y de Malta.
En 1919 fue declarada Monumento Nacional por la Real Orden del 4 de junio de 1919 y el 31 de mayo de 1951, volvió a tomar posesión de ella la dicha Orden Militar y Hospitalaria de San Juan de Jerusalén, de Rodas y de Malta, que se ha encargado de su conservación y cuidado hasta ahora.


Otra curiosidad de esta iglesia es que sólo se celebra el culto en ella en bodas y demás celebraciones sociales y el día de Viernes Santo con la procesión del Cristo Yacente y el Lignum Crucis (lo que se supone que es una astilla de la verdadera cruz de Cristo), que comienza en la iglesia de Zamarramala ( el pueblo, ya barrio, que se encuentra en lo alto de la serpenteante [ya no tanto como antes] carretera que hay junto a la Vera Cruz). Es una procesión espectacular con antorchas y cánticos: y los caballeros de la Orden de Malta acompañan al Cristo vestidos con el uniforme de la Orden.



Como casi todo en Segovia, la Vera Cruz también tiene su leyenda:
Se dice que recién inaugurada la iglesia murió un caballero de la orden y que se le dejó dentro de la iglesia durante toda la noche antes de ser enterrado. En un descuido de los demás hermanos de la orden, dejaron solo el cadáver... los grajos entraron en la iglesia y se ensañaron con el cuerpo, que quedó destrozado. Al regresar, el prior de la orden puso el grito en el cielo y espantó a las aves a la vez que las echaba una maldición para que no volviesen a aparecer por la iglesia... la leyenda asegura que nadie ha vuelto a ver grajos sobre el tejado de la Vera Cruz.

Castillo de los Duques de Alburquerque-Cuellar (Segovia)

El Castillo de Cuéllar fue declarado junto a las murallas, Monumento Artístico Nacional en 1931. Se sitúa en la parte más alta de la villa, muy cerca de la carretera de Valladolid. El edificio aparece documentado en 1306, siendo rey Enrique IV, quien cedió la villa de Cuéllar y el castillo a D. Beltrán de la Cueva, Duque de Alburquerque, en 1464. Por ello, también es conocido como el palacio de los Duques de Alburquerque. Bajo el torreón sureste se encuentra la parte más antigua de la fortaleza originaria, que podría datarse en torno al siglo XII. Tiene planta rectangular con cuatro torreones en las esquinas, tres de ellos circulares. En el interior se abre un patio de columnas que sostienen una doble galería con arcos rebajados del siglo XVI, al que se abren los diferentes salones decorados con artísticas techumbres, artesonados de estuco y vigas talladas.










Convento de San Francisco(Cuellar)

En un lateral del Parque de San Francisco, se levantan las ruinas de la iglesia y convento de San Francisco, ya existente en 1257, aunque en el siglo XV los Duques de Alburquerque lo eligieron como lugar de enterramiento, reedificándolo y enriqueciéndolo considerablemente. La iglesia, que se construyó en estilo gótico con grandes proporciones, estaba adosada al convento. Fue desamortizado en el siglo XIX y utilizado como fábrica de harinas hasta los años sesenta. Tras un incendio y el abandono posterior, lo compró el Ayuntamiento. En la actualidad, están consolidados los muros de la nave central y se han rehabilitado las tres capillas laterales.
El apostolado de piedra de las columnas góticas se encuentra hoy en el Castillo de Viñuelas (Madrid). Parece ser que en ella trabajó Haniquín y en una segunda fase en torno a 1524 pudo colaborar Juan Gil de Hontañón, que tuvo a su cargo obras en Cuéllar.

Iglesia arciprestal de San Miguel(Cuellar)

Situada en la Plaza Mayor se encuentra la Iglesia arciprestal de San Miguel. El edificio es fundamentalmente gótico, aunque posee elementos románicos, mudéjares y renacentistas. Las capillas conservan bóvedas de crucería y ventanas góticas y según Fernández de los Ríos, en esta iglesia se puso hacia 1395 el primer reloj de torre de España.

Iglesia de San Martín-cuellar(SEGOVIA)

la Iglesia de San Martín, que en la actualidad alberga el Centro de Interpretación del Arte Mudéjar. Fue declarada también Monumento Artístico Nacional en 1931 y es una de las mejores muestras de la arquitectura de la villa. Tiene tres naves, la central más ancha y alta, separadas por pilares y cubiertas de ladrillo con arcos fajones, con el ábside central, con bóveda de horno, más grande que los laterales. En el exterior, los ábsides se decoran con arquerías ciegas de medio punto dobladas, siendo la superior arquitrabada. La torre es independiente y se sitúa a los pies del templo, junto a la triple puerta de acceso. Fue desamortizada a mediados del siglo XIX, permaneciendo en manos privadas y ruinosa hasta que la compró el Ayuntamiento y la restauró la Escuela Taller en los años ochenta del pasado siglo XX.

Arco de San Basilio-cuellar(SEGOVIA)

Formando parte de las murallas de la ciudadela en su parte norte, se encuentra el Arco de San Basilio, conocido también como Arco del Robledo. Su construcción data probablemente del siglo XII, junto con el Arco de San Andrés, conteniendo principalmente elementos mudéjares y algunos góticos en los remates de alguno de sus paños. Es una pequeña fortaleza flanqueada por un cubo torneado y torreón de planta rectangular. Tiene un arco de triple anillo.